lunes, 11 de marzo de 2013

PROPUESTA PERSONAL: Iglesia de la Candelaria de Zafra

Hasta mediados del siglo XVIprimitiva iglesia de Santa María de la Candelaria de Zafra ocupaba junto a su cementerio anexo lo que en la actualidad es la Plaza Grande de Zafra, no habiendo ningún dato acerca de la época de su construcción ni sobre si sufrió o no modificaciones de importancia, pero lo que si sabemos es que era una iglesia pequeña de forma que en los días de fiesta los feligreses no cabían en ella; además su estado de conservación tampoco era el idóneo. Todo ello llevó al II Conde de Feria, Gomes II Suárez de Figueroa a solicitar bula al Papa Alejandro VI para convertir en parroquia la antigua sinagoga e Zafra, ya reconvertida en iglesia, bula que obtiene en 1500. No obstante, se sabe que se siguió usando también la antigua iglesia medieval al menos hasta 1546, ya en un estado de ruina evidente y progresivo.



Aunque no conocemos la fecha exacta del comienzo de las obras de la actual Candelaría, no sería arriesgado decir que fue en 1527 en tiempo del III Conde de Feria, Lorenzo III Suárez de Figueroa quien acordó con el Concejo de la villa la erección en terrenos cedidos (o permutados), al menos en parte, por don García de Toledo hermano del III Conde. La primera fase de la construcción termina sobre 1545 y su artífice principal fue el maestro Juan García de las Lieves, si bien no parece que fuera el autor de las trazas surgidas del novedoso y renovador goticismo de la época de los Reyes Católicos. En dicho año de 1545 la iglesia ya estaba en condiciones de acoger el culto teniendo edificado la cabecera, el transepto y la antigua sacristía.

Una inscripción

Esta inscripción está situada en el convento de Santa Clara en la calle Sevilla de Zafra. Son inscripciones romanas expuestas en láminas. Hay dos láminas que miden unos dos metros por sesenta centimetros.
                                                                                                                                                                     
Tres lápidas romanas de unos dos metros de alta.
Las lápidas no se saben de donde provienen ni de que época son. Tampoco se sabe quien las llevo allí ni lo qe pone en ellas. Las lápidas están expuestas al aire libre por lo que est´n muy deterioradas.
Yo creo que las podían conservar en un lugar donde no se mojasen ni cogiesen humedad ya que tienen un gran valor.

El pilar del Duque

Una tarde cualquiera, fui con Álvaro, uno de mis mejores amigos, a dar una vuelta en bici como casi todas las tardes que sale el sol. Ese día se me acordé de que tenía que hacerme las fotos de sociales. Álvaro y yo fuimos a muchos sitios ha hacerme las fotos y por último nos pasamos por el pilar del Duque.
El pilar del duque es de estilo gótico y consta del siglo XV. El pilar antes se encontraba enfrente de la Puerta Palacio es decir del Alcázar pero fue trasladado al sitio donde se encuentra actualmente es decir en la plaza de enfrente de la biblioteca. El pilar esta hecho de piedra y también se puede apreciar que es de granito de las canteras de Alconera al igual que la torre san Francisco. El pilar es muy largo y en el medio hay como una torre por así decirle que en primer lugar el cuerpo donde está el surtidor es octogonal rematado con un pináculo floreado en el surtidor vemos la cara de un humano con un tuvo en la boca por el cual antes echaría agua, el agua ahora es expulsada por otros dos tubos, cada uno a un lado de la cara mas para arriba encontramos un pináculo floreado de Azuzenas que se dice que es el símbolo de Zafra y al lado había un escudo el cual ya no se puede contemplar debido a que cuando los franceses vinieron a España lo picaron por motivo a la política de esos tiempos. Ya en la parte de arriba encontramos que hay como cabezas de animales y esto de debe a que había un mercado por allí y los ganaderos llevaban a su ganado a beber allí y decidieron representar esto de esa manera y dando un toque final encontramos una redondel de hierro el cual tendrá su significado.

Yo en el Pilar del Duque



Una bujarda

Una bujarda es un chozo donde antiguamente estaban los pastores mientras las ovejas pastaban.
Esta bujarda se localiza en Zafra, cuando te diriges al Castellar subiendo por la pista que han hecho nueva.
Al dirigirme a la bujarda puedo observar que s una bujarda bastante grande. No se las medidas exactas de esta pero mide de ancho unos 2 metros o dos metros y medio. De altura no se puede medir bien debido a que tiene una chimenea que sobre sale del techo. La puerta mide un metro y setenta u ochenta centímetros.
Entrada a la bujarda
                                                                            
 La bujarda está hecha con piedras y tierra como la mayoría de estas. Al entrar, si miras a la derecha hay un banco adosado que está curvado. Tiene una chimenea en frente de la puerta.
El estado de conservación no es muy malo pero la gente deja allí latas, botellas, parrillas...
Una parte de la bujarda está pintada de blanco que por cierto tiene grafitis pintados encima.
Cuando yo fui había unas veinte botellas de cerveza que como bien he dicho antes tiene muchas porquerías dentro.


                                                               
                      
                                                                    

miércoles, 6 de marzo de 2013

La Virgen de Guadalupe

La Virgen de Guadalupe es una advocación mariana cuyo santuario está situado en el pueblo llamado del mismo nombre en la provincia de Cáceres, en la comarca de las Villuercas. Es la patrona de Extremadura desde el año 1907. Su fiesta se celebra el 8 de Septiembre, festejándose también el día de Extremadura.

Se trata de una talla románica, tallada en madera de cedro. No se sabe si fue encontrada a finales del siglo XIII o principios del XIV. Según una antigua leyenda fue encontrada por un pastor de nombre Gil Cordero, vecino de Cáceres, que se le apareció junto al río Guadalupe.

Pertenece al grupo de las conocidas como Vírgenes negras. Tiene una altura de 59 cm. y 4 kilos de peso. Se trata de una imagen sedente con el Niño Jesús sentado en sus piernas. En la actualidad la imagen se encuentra vestida con una gran capa triangular ricamente decorada dejando sólo a la vista la cara de la virgen.
El Niño en actitud de bendecir se encuentra sentado sobre las rodillas de su madre, mide 23 cm. y pesa 200 gramos. La mano derecha del Niño es de plata tallada debido a que la mano original se perdió, por lo que hubo que reemplazarla en el siglo XIV.
 
 
Anteriormente la virgen no tenia nada de vestidos ni accesorios lujosos, pero la virgen sin estos vestido se le veía simple y decidieron añadirle coronas, anillos... y vestidos por lo que solo se ve la cara y mano de la virgen y la cara del niño.
La Virgen sostiene al Niño, algo recostado en su pecho, con la mano izquierda
(mano que no es visible ya que se oculta bajo los vestidos), portando un cetro, con la
derecha. Del cuerpo de la Virgen tan solo son visibles su rostro y su mano derecha, muy
delicadamente tallada. La mano extiende sus finos y delgados dedos hacia el frente
sosteniendo entre ellos, con gran finura, el cetro ya mencionado.
El Niño pende de un anillo sujeto a los vestidos de su madre. Igualmente
realizado en madera, de él, lo mismo que la Virgen, sólo se aprecia su rostro (modelado
en pasta) y su pequeña mano derecha que está en actitud de bendición. La mano del
Niño, sin embargo, está efectuada en plata. Unida al antebrazo, éste no es visible pues
se halla oculto bajo sus vestidos.
La menor habilidad y delicadeza que se observa en el Niño han hecho pensar
que se debe a un artista diferente del que efectuó la talla de la Virgen.
La talla pertenece al grupo de vírgenes negras de Europa occidental de los siglos XI-XII. Desde el siglo XIV aparece vestida con ricos mantos y joyas.

La casa del Marqués de Solanda



La enorme mansión de la familia del Marqués del Solanda, uno de los edificios de arquitectura civil
más interesantes de la ciudad de Zafra. Se trata de una obra neomudéjar, en la que destaca un
bellísimo patio mudéjar que constituye la construcción más importante de la arquitectura neoárabe
extremeña. Una construcción que, ya en su exterior, va pregonando la categoría que predomina en
su interior. Su arquitecto fue un hombre llamado Ventura Vaca.

En la fachada occidental hay una ventana con frontón y adornos platerescos. Además, artísticos
relieves en balcones y cornisas (en color albero), capiteles de factura corintia y una serie de huecos
bien organizada, completan esta enorme fachada blanca y encalada, dando belleza en conjunto a la
vivienda. Dicha vivienda fue actualizada en su arte, a principios del siglo XX, sobre los muros de
otra que ya existía anteriormente.
Aquí os voy a mostrar una foto del hall:


Hall de la casa del marqués de Solanda



Su estilo a partir de la puerta de entrada es totalmente diferente, siendo el zaguán de azulejos de zócalo, de estilo islamista un poco romántico. 

El patio está formado por columnas y arcos de herradura de medio punto y otras dobles; su parte superior es una galería de balcones que se abren al patio, todos ellos cerrados con cristaleras. Cubren totalmente los muros una decoración tipo rombo, rematados en forma de almena. Representa una arquitectura con el significado de lo árabe de a principios del s. XIV. En el centro del patio luce una hermosa fuente, cuyo cuerpo donde está el surtidor es octogonal rematado con un pináculo floreado.

La fachada está compuesta por azulejos de zócalo y una estucada decoración de las paredes, además de un arco de herradura que da acceso al patio y un simulado artesonado en el techo. El primer piso del edificio posee una arquería de vanos de arco de herradura que descansan sobre columnas. El segundo nivel corresponde a una galería de balcones de solo un vano y de dos con mainel que se abren al patio, todos son de arcos angrelados, es decir, arcos de herradura y con alfiz. Los muros están cubiertos por una decoración romboidal en ambos pisos del patio, los cuales rematan en una línea de almenas escalonadas, elemento muy utilizado en la arquitectura neoislámica del siglo XIX.
Fachada de la casa del marqués de Solanda

La alcazaba de Montemolín

 
 Alcazaba de Montemolín desde lejos.
 
 
 
La alcazaba de Montemolín, como podéis observar en la foto, destaca sobre el monte en el que se encuentra situada.

La alcazaba  es una fortaleza de origen árabe (siglo XII), fabricada con adobe y ladrillo. Se alza sobre un cerro desde el que domina en altura la localidad del mismo nombre, en la provincia de Badajoz. Su planta es irregular y de proporciones alargadas. El perímetro de la alcazaba es de 114 metros de longitud y 54 metros de anchura y 33 metros de altura. Fue reconstruida por los cristianos con piedra. Tiene numerosas torres ochavadas de diferente configuración y medida.
La alcazaba, con reformas a partir de 1248, es propiedad del Ayuntamiento de Montemolín. Se encuentra en estado de ruina, pero se han consolidado sus muros y torres. 

De sus antiguos componentes se conservan la puerta en recodo,
 algunos aljibes, mazmorras y otros restos que patentizan su
antigua grandeza, aunque están en estado de ruina.
 En el interior de la fortaleza existía también una iglesia,
hoy desaparecida por completo, dedicada a Santo Domingo,
que contaba con dos altares, uno de ellos dedicado al titular                                                                                                  Una Torre adosada
y otro a Santiago.
La puerta principal se encuentra defendida por dos torres en avance.  Se  accede por un arco de ladrillo de unos 3 metros de espesor.
Otras torres, algunas semicilíndricas, refuerzan el recinto defensivo.
 La mayor de ellas está construida en piedra y existe otra de composición más artística, a modo de baluarte, que posiblemente fuera utilizada como alojamiento principal durante ciertas épocas. Los árabes construyeron un aljibe de planta rectangular, y se cubrió con  una falsa bóveda de medio cañón construida con lajas de pizarra.

Numerosas fueron las reformas realizadas por los cristianos en la fortaleza, para adecuarla al uso de la Orden Militar de Santiago. No cambiaron la apariencia externa, limitándose a rehacer o reforzar las partes más débiles y dañadas. Incluyeron en él una torre con unas medidas de 14 metros de longitud, 10 metros de anchura y planta trapezoidal como Torre del Homenaje. La subida a esta torre se efectuaba por una escalera de ladrillos al final de la cual se levantaba un puente levadizo. Se construyó otra llamada popularmente "Plato de la reina" de procedencia cristiana. Su planta es semicircular.
La fortificación contó con dos plantas superpuestas comunicadas por sólidas escaleras. En la primera planta estaría en un lateral, la iglesia de Santo Domingo, despensas, bodegas, cámaras y el Aljibe de los Arcos situado en el centro del patio. En la segunda planta habría corredores, cámaras de distintos usos y la capilla de Santo Domingo. Además, en distintos lugares de la fortaleza, se podían encontrar cocinas, pasadizos, pajares, pesebreras, hornos, mazmorras excavadas en el subsuelo…
 
 
Hace poco la alcaza ha sido restaurada

Fachada de la casa del Ajimez



Esta casa ofrece a sus visitantes una palpable prueba de su pasado morisco, que desafiando el paso de algunos siglos, muestra a la generación actual el testimonio de una cultura con la que se identificó plenamente la villa de Zafra. La fachada es del siglo XV, una obra de arte mudéjar (característica de los musulmanes que vivían en territorios conquistados por los cristianos). Está cubierta de esgrafiados geométricos, encalados después en la mayor parte de su superficie de la pared. La técnica del esgrafiado consistía en dibujar sobre el revoque de los muros estando aún fresco, raspando la cal, con lo que se conseguía una decoración barata, que en algunas ocasiones llegaba hasta colorearse. Se trata de uno de los pocos restos de esta técnica decorativa, que abundó en la ciudad durante los siglos XVI y XVIII, y que contrasta con esa idea de pueblo blanco que actualmente le caracteriza.

Sobre esta fachada esgrafiada se conserva, como principal adorno y punto de atención artístico, un precioso ajimez morisco, que data aproximadamente del siglo XVI. Es el único ejemplar de su clase perteneciente a todo un pasado histórico de la ciudad de Zafra.
Esta ventana geminada está partida en su centro por una columnita de piedra. Cuenta con un arco polilobulado en artístico ladrillo trabajado, ya que tiene adornos de formas geométricas (arabescos) y volutas (ornamentos en forma de espiral) en los extremos de dichos lóbulos. Unos brillantes azulejos forman el marco y el antepecho de la ventana, sirviendo también de fondo en los vanos que dejan los ladrillos a ambos lados de los arcos. Además, podemos apreciar que la fachada no está totalmente vertical (a plomada). Su estado de conservación es bueno después de su restauración; se pueden apreciar perfectamente tanto el esgrafiado como la ventana morisca o ajimez.

Ventana encima de la fachada de la casa

                            





CASA DEL AJIMEZ
Entre todos los edificios que conforman la calle Boticas de la localidad de Zafra, la casa número 6 destaca por su singularidad. Recibe el nombre de casa del Ajimez, hoy Centro de Acogida al Turista. La vivienda tenía doble finalidad: comercial (planta baja) y privada (planta alta).  Desde finales del siglo XV albergaba las boticas de la villa, en cuyo interior existían una o varias armaduras repletas de botes y cajas, que contenían diversos productos de la farmacopea del momento. Estos productos eran mezclados por medio del almirez, el alambique o la redoma, dando como resultado drogas y compuestos con los que aliviar a los enfermo. En el siglo XIX  pasó a ser una tienda de licores y aguardientes y en el siglo XX ya era una vivienda particular.


Vista de la casa del Ajimez por fuera